Ministra y ministros oaxaqueños en la SCJN SDP Noticias
A mi querido profesor, jurista, amigo y paisano, el doctor Eduardo Francisco Ramírez García
Las y los oaxaqueños y mexicanos debemos celebrar el inminente acceso del Mtro. Hugo Aguilar Ortiz, de origen indígena de Oaxaca, a la ministratura y presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (la Corte). Este histórico y trascendente acontecimiento es el fruto no sólo de la inédita y compleja elección popular de la judicatura del pasado 1º de junio, sino de la consistencia del trabajo jurídico y político de más de tres décadas del abogado mixteco en favor de los derechos de los pueblos y comunidades originarios y afromexicanos.
La ocasión es pertinente y oportuna para refrescar la memoria común sobre la galería de eminentes juristas y políticos de Oaxaca que han integrado el Pleno de nuestro máximo tribunal de justicia, especialmente desde la vigencia de la Constitución de 1857. Por razones de espacio, y a partir de fuentes disponibles en línea, los mencionaré de manera general y en forma de lista.
- Benito Juárez García (Guelatao, 1806-1872), ocupó el cargo de ministro y presidente de la Suprema Corte entre 1857 y 1858, mismo desde el cual, por mandato constitucional, en enero de este último año se convirtió en presidente de la República cuando el presidente Ignacio Comonfort decidió solicitar licencia y desconoció la Constitución bajo la cual habían sido electos.
- Porfirio Díaz Mori (Oaxaca, 1830-1915), si bien fue electo para el cargo de magistrado propietario de la Corte el 13 de abril de 1883, no lo asumió pues optó por el Senado de la República.
- Manuel Contreras (Oaxaca, sin fechas), ferviente porfirista, fue magistrado propietario en la Corte, de 1880 a 1886.
- Ignacio Mariscal Fagoaga (Oaxaca, 1829-1910), quien es mejor conocido por su larga carrera política y diplomática, ocupó el cargo de ministro en dos momentos pues fue nombrado por Juárez como magistrado interino en enero de 1862 y por Díaz como magistrado propietario en octubre de 1880.
- Demetrio Sodi Guergué Antuñana (Oaxaca,1866-1934) se desempeñó como periodista, escritor, jurista y político, y ejerció el cargo de presidente de la Corte de 1908 a 1910.
- Francisco Modesto Ramírez (Ejutla, 1867-1955), de ascendencia indígena y afromexicana, fue ministro y presidente de la Corte entre los años 1923 a 1928, con el respaldo interesado del líder y presidente de la República, Plutarco Elías Calles.
- Genaro V. Vázquez (Xoxocotlán,1892-1967), después de que fuera gobernador del Estado, cubrió un largo periodo como ministro del 1º de enero de 1935 hasta septiembre de 1952.
- Eduardo Vasconcelos (Oaxaca, 1895-1953), desempeñó el cargo de ministro de enero de 1941 a abril de 1953, y después se convirtió en gobernador del Estado.
- Alfonso Francisco Ramírez Baños (Teposcolula, 1896-1979), hijo de Francisco Modesto Ramírez, fue ministro de la Corte el largo periodo que corrió entre 1940 y 1959.
- Alfonso Pérez Gasga (Pinotepa Nacional, 1890-1964), ocupó el cargo de ministro provisional entre septiembre de 1932 y enero de 1941, y más tarde sería gobernador del Estado.
- Carlos Franco Sodi (Oaxaca, 1904-1961) inició su periodo como ministro numerario en 1956.
- María Cristina Salmorán de Tamayo (Oaxaca, 1918-1993) cubrió el periodo del 16 de mayo de 1961 al 16 de febrero de 1986. Fue la primera mujer ministra de nuestra historia.
- Jorge Olivera Toro y Cordero (Oaxaca, 1917-1999) ocupó el cargo de ministro de la Corte del 14 de febrero de 1980 al 18 de agosto de 1987.
- Alfredo Iñárritu y Ramírez de Aguilar (Oaxaca, 1896-1964), fue ministro a partir del 1º de enero de 1935.
- Juan Díaz Romero (Putla, 1930-2006), fue ministro del 26 de enero de 1995 al 30 de noviembre de 2006.
Junto con el Mtro. Hugo Aguilar, ha trascendido que accederá a la Corte el próximo mes de septiembre otro colega, de madre oaxaqueña, Irving Espinoza Betanzos.
Esperamos que la lucha por revertir el “estado de excepción inverso” en el que estamos atrapados, la demanda por recuperar el estado de Derecho y ponerlo al servicio de todas y todos, guíen sus trabajos.
Hay una historia de ilustres juristas oaxaqueños y mexicanos que honrar, pues los estados de Chiapas, Guanajuato, Puebla, Veracruz, Estado de México o Michoacán, y desde luego la Ciudad de México, entre los más frecuentes, han aportado a la Corte enorme talento, además, desde luego, de a numerosos otros cargos judiciales.
Hoy, como ayer, el reto es mayúsculo ya que el país entero exige el ejercicio honesto, humano y con sentido social de la justicia, el fin de lo innecesario, la corrupción y la impunidad.
Como se dijo en la Corte, cuando esta fue relevada en su conjunto ante la llegada del presidente Lázaro Cárdenas, en 1934: “Tenemos hambre y sed de justicia”.
